Por María Ruiz Juri y María Belén Santillan Arias
Jueves, 23 de junio de 2022
Quienes estamos en la docencia, sabemos que una de las cosas más desafiantes con las que nos enfrentamos al preparar y dar clases es lograr el engagement de nuestros estudiantes. Y, cuando pensamos en clases virtuales sincrónicas, parecería ser que este desafío es aún mayor. El engagement significa de alguna manera compromiso y conexión emocional, y también hace referencia a cuán activamente se encuentra involucrado el individuo en una determinada actividad.
Entonces, si decimos que es clave lograr que los estudiantes se involucren activamente en una clase para que aprendan mejor, ¿cómo conseguir que los estudiantes se comprometan activamente en las clases virtuales sincrónicas y quieran efectivamente participar en vivo en lugar de verlas grabadas?
Te ofrecemos a continuación diez claves para que tengas en cuenta, cinco de ellas para considerar antes de la clase y las otras cinco durante su desarrollo. Esperamos que te resulten de suma utilidad.
Antes de las clases:
1. Anticípate
Un día o dos antes del encuentro sincrónico, sugerimos enviar un mensaje a los estudiantes anticipando el tema del encuentro. Es importante ser concisos en el mensaje y generar expectativa de lo que va a suceder. ¿Habrá algún invitado? ¿Se trabajará alguna inquietud en particular? ¿Se puntualizará en una temática vinculada a un hecho social reciente? ¿Se hará una autoevaluación?
El mensaje debe dejar claro que el encuentro será interesante y que no pueden perdérselo en vivo.
2. Planificá la interacción
¿Qué diferencia hay entre estar en el encuentro sincrónico y verlo grabado? Sin dudas es la posibilidad de poder interactuar con el docente, invitados (si es que hubiera) y compañeros, es decir, co-construir el encuentro.
Por eso, será clave planificar las instancias de interacción con los estudiantes, identificar aquellos momentos en los que éstos puedan ser protagonistas tomando la palabra (oralmente o a través del chat), realizando alguna actividad, resolviendo un test en vivo, participando de alguna propuesta de juego interactivo o decidiendo alguna variable del encuentro.
También, es una opción muy interesante proponer una actividad colaborativa (o individual también) desde un mural colaborativo, una nube de palabras o un juego de ingenio. Pensar en actividades lúdicas que sirvan de puntapié inicial para desarrollar un tema o trabajar alguna duda recurrente que el docente identifica.
3. Incorporá diversos recursos digitales
Es clave decidir con qué recursos digitales vamos a trabajar: imágenes, gráficos, videos, audios, presentaciones multimedia, etc.
Es fundamental tenerlos preparados y a mano antes de que comience la clase para ahorrar tiempo y no correr el riesgo de perder el interés por parte de los alumnos.
4. Organizá la clase en momentos y pensá inicios y cierres memorables
Los expertos en la temática sostienen que el inicio y cierre de una clase deben ser realmente potentes. Un breve video de una temática actual, una canción, o una publicidad disruptiva pueden servir como recurso. Lo importante es que este inicio o cierre del encuentro sea recordado por su potencia en el contenido y en la vinculación con el contexto de los estudiantes. De acuerdo a los contenidos de mi módulo, ¿qué alternativas de inicio o cierre dispongo?, ¿qué puede inspirarme para hacerlo?
Además del inicio y cierre, sin dudas es clave pensar en actividades de aprendizaje que resulten útiles para el estudio y sirvan para preparar las instancias de evaluación.
5. Buscá relacionar la clase con lo que pasó y con lo que viene
Promover una propuesta de clase que resulte desafiante y relacionada con lo que ya se trabajó y lo que se hará próximamente.
Durante las clases:
1. Dales la palabra
Esto implica lograr que circule la palabra: leé sus gestos, sus silencios, prestá atención a lo que sucede y si surgen dudas e inquietudes. Hacelos sentir parte de la propuesta, que sientan que su presencia es importante.
2. Llamalos por su nombre
Personalizá el encuentro recurriendo a los nombres de los participantes. Felicitalos por la participación y alentá que hablen o escriban en el chat durante la clase.
3. Promové un clima ameno
Promové un clima agradable, de confianza, donde se puedan equivocar libremente sin sentir presión.
4. Cambiá los ritmos y tonos de voz
Sabemos que un encuentro sincrónico pasa por distintos momentos que fuimos pensando previamente, algunos serán de escucha, otros de participación activa mediante una actividad o de toma de palabra, quizás algún momento lúdico, etc. En cada instancia, nuestra voz en sus diferentes ritmos y tonos puede ir creando un ambiente de expectativa, de complicidad o de confianza.
5. Permitite cambiar e improvisar
Si no está funcionando la dinámica, no es algo malo, al contrario, es una oportunidad para reformular la propuesta o pedirles a los estudiantes que tomen la palabra y propongan alternativas para trabajar el tema.
Recordá que nadie más que vos tiene claros los objetivos de la clase, estos servirán de brújula para llegar a destino, aunque sea diferente el camino.
Esperamos que estas claves te hayan resultado de utilidad. Ahora sí, a disfrutar de la clase.
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