Pedagogía

Diez claves para una defensa oral de tesis exitosa

Prof. Florencia Corsánigo
Docente de grado, asesora metodológica de trabajos finales y asesora pedagógica en UBP

Mgter. María Ruiz Juri
Docente de grado y Coordinadora del Programa de Perfeccionamiento Docente en UBP

Prof. Margarita Valero
Docente de grado, asesora metodológica de trabajos finales y asesora pedagógica en UBP

Jueves, 22 de junio de 2023

A menudo los futuros egresados nos consultan cómo preparar una defensa oral de tesis o trabajo final. Mucho hay para decir sobre este tema y es bastante también lo que se ha escrito. En este sentido, nuestra intención es compartirles algunas ideas para que puedan sentirse a gusto con esta instancia tan especial e importante, desde una actitud segura y con la confianza de haber participado del proceso de construcción del trabajo y estar ahora en condiciones de compartirlo de la mejor manera posible.

Teniendo en cuenta que la defensa del trabajo puede ser virtual o presencial, les proponemos organizar el discurso de manera ágil y creativa, respetando el tiempo asignado para la presentación y sin perder de vista los puntos más importantes del trabajo.

A continuación presentamos algunas claves a tener en cuenta:

1. Soñar e imaginar

¿Cuántas veces imaginamos este momento? ¡Y por fin llega el día!

Habiendo llegado a esta instancia y tratándose de una ocasión única en el proceso de formación, es importante permitirnos soñar y visualizar cómo queremos que sea ese momento de presentación. ¿Cómo puedo mostrar esta idea? Se trata de imaginar toda escena posible, pensar en los recursos para luego ponerlos en diálogo con otros y ajustar lo que sea necesario. En esta primera instancia los invitamos a no limitarse y pensar diferentes posibilidades.

Sugerimos una lluvia de ideas que permitirá registrar anotaciones a partir de ideas e inspiraciones que vayan surgiendo, todas estas son herramientas valiosas para dejar volar la imaginación.

2. Integrar

Resulta fundamental establecer la coherencia entre los diferentes componentes de la tesis o trabajo final. Esta clave tiene que ver con desarrollar la exposición y recuperar los principales componentes: ¿Por qué se decidió estudiar determinada temática? ¿Cuál es la pregunta problema? ¿Qué objetivos se plantearon? ¿Cuál fue el marco teórico y categorías de referencia? ¿Qué autores resultaron claves? ¿Qué metodología se utilizó? ¿Cuáles fueron los principales hallazgos? ¿Qué conclusiones se elaboraron? ¿Cuáles fueron los principales logros y desafíos? Presentar las respuestas a estos interrogantes servirá para mostrar a los interlocutores cuáles fueron las decisiones que se tomaron para arribar a las conclusiones. Se trata de darle sentido propio desde la oralidad al trabajo escrito.

En esta clave, es válido recuperar lo imaginado en una primera instancia, y organizar los momentos de la presentación teniendo en cuenta las preguntas que integran el trabajo. Podrán ir depurando la información, a modo de evitar ser reiterativos con lo escrito en la tesis o trabajo final.

3. Reflexionar

En el transcurso de la defensa debemos dar cuenta del proceso reflexivo que sostuvo las diferentes etapas del trabajo final, por ello es importante tomar en cuenta los principales datos, hallazgos y conclusiones que se construyeron a partir del trabajo realizado.

En la misma línea que la clave anterior, la idea es volver a mirar todo el recorrido realizado y analizar, desde las propias prácticas, lo aprendido.

En este punto es importante trabajar y prestar mucha atención a las posibles devoluciones y recomendaciones que haya hecho el tribunal evaluador previo a la instancia de defensa.

4. Innovar

Esta clave pretende potenciar la originalidad e integrar en la instancia de defensa una propuesta que resulte novedosa respecto de la temática estudiada y los hallazgos encontrados. La propuesta de incorporar recursos o metodologías originales para la defensa contribuye a que quienes están evaluando en esta instancia, también encuentren algo diferente a lo que se leyó en el trabajo final. Un salto cualitativo respecto de lo que ya se elaboró y aprobó.

Sugerimos no forzar la situación, cada uno tiene un estilo propio de contar, de pararse frente a otros. Pero también es una instancia en la que podemos despertar algunas habilidades que no conocíamos. “Salir del molde” es lo que nos permite crecer profesionalmente, también, descubrirnos y potenciarnos. La clave que sigue nos ayudará a pensar formas de hacerlo.

5. Buscar inspiración

Recomendamos elegir una metáfora, una imagen disparadora y a partir de allí elaborar una presentación multimedia. En este sentido, podemos dotar de originalidad y sorpresa a través de varios recursos y lenguajes: sonidos, imágenes, insumos multimediales, etc., objetos que nos permitan mostrar algo que quizás no estaba documentado pero que tiene que ver con lo que se realizó.

Al ser esta instancia una oportunidad para integrar lo trabajado qué mejor que hacerlo utilizando lenguajes y recursos que sumen y aporten al lenguaje académico. Por ejemplo, una metáfora del camino para ilustrar el recorrido o la letra de una canción para relatar la experiencia o los hallazgos encontrados.

6. Elaborar la presentación multimedia  

Para la elaboración de la presentación multimedia debemos prestar especial atención a las reglas de ortografía, la calidad de las imágenes, el sonido en caso de emplearlo, la extensión y las citas de referencia de estos elementos, entre otros.

Es importante que la presentación contenga información relevante, contundente y que no reproduzca fragmentos del trabajo a modo de resumen. La presentación que vayamos a realizar debe dar fuerza y acompañar la exposición, complementar la palabra, construir la escena. No debe solapar ni tomar protagonismo total ya que opera como parte de un todo.

7. Trabajar la oratoria

La forma de expresarnos en el transcurso de la exposición oral resulta fundamental. Es por ello que alentamos a trabajar previamente sobre el uso de la voz, el lenguaje verbal, no verbal, los gestos y posturas.

Algunas pistas para ejercitar este aspecto son: grabarnos y escucharnos, hablar frente al espejo o frente a otros, “amigarnos” con nuestra voz, nuestros gestos y palabras. Este es un buen momento para dialogar relaciones entre el cuerpo, el tiempo y lo creado para la presentación. Proponemos utilizar el cuerpo como recurso extensivo de la oralidad, las manos para dar énfasis o acompañar un concepto. Si el escenario lo permite, recomendamos caminar el espacio para ejercitar la expresividad.

Para trabajar esta clave es importante observar a otros en esta situación, mirar videos de charlas, de story telling, stand up y ponencias en diferentes ámbitos. Trabajar la oratoria posibilita concientizar los ritmos del discurso, las respiraciones, gesticulaciones, silencios, permitiendo acercarnos a nosotros mismos como seres vivos en expresión, más allá de la palabra.

8. Visualizar y practicar

Esta clave propone articular las otras claves que venimos detallando y aprovechar para practicar y ensayar los tiempos de cada momento imaginado, preparándonos activamente para el día tan ansiado.

Si el trabajo final fue de elaboración grupal, es esencial que se organicen roles para así estar atentos tanto a los detalles de la presentación y trabajar de forma armónica.

Sugerimos practicar la defensa acompañada de la presentación, simular preguntas y respuestas, observar la corporalidad y la fluidez del discurso.

9. Pensar a futuro

Después de haber realizado el trabajo de elaboración de la tesis y de estar ahora en situación de preparación de la defensa oral, es posible que perciban la presencia de algunos interrogantes que empiezan a surgir, latentes desde nuevos lugares y con nuevas relaciones por conocer. ¿Qué líneas se abren a partir de lo trabajado? ¿Qué horizontes o indicios se vislumbran?  

Tengan presente que la defensa oral de tesis es una instancia que plantea una revisión sobre lo trabajado para que los tesistas puedan autoevaluarse tras el proceso realizado y elaborar valoraciones y propuestas, esta pista es quizás una potencial clave del éxito.

En este punto se pueden recuperar algunas ideas del trabajo realizado y dilucidar transformaciones conforme la investigación fue avanzando, problematizando y articulando ejes que hacen a las incumbencias de sus futuros profesionales.

Es un momento clave para poner en común algunas reflexiones o preguntas que pueden quedar abiertas para posteriores ejercicios de construcción de conocimientos.

10. Disfrutar

Una de las cosas más importantes que incide en todo momento tiene que ver con disfrutar de la preparación y el desarrollo de la defensa del trabajo final. Eso no solo nos ayuda a que resulte exitosa, sino que también genera en nosotros una alegría y bienestar que se transmite y contagia. Para ello la planificación y dedicación al momento de diseñarla resulta fundamental.

¡Esperamos que estas pistas inspiren sus creaciones y que sea un momento inolvidable para ustedes! Los invitamos a pensar otras claves que puedan colaborar en la defensa de sus tesis o trabajo final.

Florencia Corsánigo

Maria Ruiz Juri

Margarita Valero

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